Cómo dar más a tus empleados pagando menos
Normalmente, los sueldos no están compuestos únicamente por dinero, sino que, en muchas ocasiones, hay otro tipo de retribuciones que, si bien son valorables económicamente, no se traducen en un pago monetario. Es aquí donde entra en juego la retribución flexible.
La retribución flexible es uno de los conceptos más comentados en el sector de los recursos humanos, sobre todo en aquellas épocas en las que no es posible subir el sueldo de los empleados o no se pueden aumentar los costes de las empresas. Así, con este tipo de retribución se puede mejorar el sueldo de los trabajadores, atrayendo a los mejores y reteniendo a aquellos con más talento.
¿Qué es la retribución flexible?
La retribución flexible, también denominada salario en especie, es la oferta de un bien, un derecho o un servicio a los empleados de una empresa de forma completamente gratuita o con un coste inferior al precio que éstos tendrían en el mercado.
De esta forma, las empresas pueden mejorar las condiciones y el salario de los trabajadores, sin necesidad de que esto suponga un gasto para la misma o un aumento del salario en dinero para el trabajador en cuestión. De esta forma, el empleado encuentra que percibe interesantes reducciones fiscales, pues podrá sacar más partido a su salario, ya que no tendrá que dedicar parte de este a pagar esos bienes o servicios que se le ofrecen de forma gratuita o más asequible.
Las empresas por su parte, obtienen beneficios fiscales al poder deducir como gastos la contratación de este tipo de beneficios para los empleados.
Ejemplo del ahorro con seguro de salud en retribución flexible
Dentro de la retribución en especie, las ofertas de bienes, servicios o derechos más habituales son las siguientes:
En el siguiente ejemplo se ilustra un cálculo de cómo beneficia al trabajador, el recibir un servicio (seguro de salud en este caso) mediante el sistema de retribución flexible y sin él.
Como se puede apreciar, el trabajador ahorra casi un 30% del coste total de su seguro si éste se aplica mediante el sistema de retribución flexible.
La retribución flexible y los seguros
Seguro de salud
Es muy habitual que las empresas ofrezcan a sus empleados la suscripción de un seguro de salud pagado por la propia empresa. En este caso, la empresa podrá deducirse en el Impuesto de Sociedades por el pago de la prima de la póliza del seguro médico, hasta 500 euros por cada trabajador asegurado. Por su parte, los empleados asegurados no tendrán que tributar por el IRPF por este concepto hasta los 500 euros anuales, pues a efectos del IRPF no se considera renta.
Planes de pensiones
Otra de las retribuciones flexibles más comunes, son los planes de pensiones, cuyas aportaciones se pueden deducir de la base imponible del Impuesto de Sociedades de la empresa.
Otros servicios que pueden usarse mediante el sistema de retribución flexible
Cuotas de gimnasio
Además de fomentar hábitos de vida saludables, las empresas podrán deducirse en el Impuestos de Sociedades el abono de las cuotas mensuales del gimnasio.
Ticket restaurante
Son muchas las empresas que dan a sus trabajadores tickets restaurante para que puedan comer durante su jornada. El trabajador no tendrá que tributar por el IRPF por este concepto hasta 11 euros por cada día laboral. Por su parte, también la empresa reducirá la cantidad que impuestos que habrá de pagar.
Servicio de guardería
Para aquellos trabajadores con hijos que aún se encuentran en el primer ciclo de educación infantil, contar con el servicio de guardería supone, sin duda, una gran ayuda y desahogo. En este caso, la empresa se puede deducir este gasto en el Impuesto de Sociedades, sin que exista una cantidad máxima. Además, este tipo de servicios ayudan a conciliar la vida laboral y familiar de los trabajadores, reduciendo el absentismo laboral y mejorando el ambiente laboral y la productividad de los empleados con hijos.
Transporte
Aquellas empresas que no están bien comunicadas por transporte público o que se encuentran a las afueras de los núcleos urbanos, este servicio es de gran utilidad. Así, la empresa puede habilitar autobuses para trasladar a los trabajadores a su lugar de trabajo, aunque también puede dar tickets transporte para que los trabajadores no tengan que incurrir en el gasto extra que supone el ir todos los días al trabajo. El trabajador podrá beneficiarse por este concepto de 1.500 euros al año como máximo.
Formación
También son muchas las empresas que ofrecen formación dentro de la misma a sus trabajadores. Sin duda, este tipo de retribuciones flexibles son estupendas para mejorar la productividad y retener a los trabajadores con talento. Además, este tipo de formación suele estar subvencionada, lo que no supone ningún coste para las empresas.
¿Cómo funciona el plan de retribución flexible?
La retribución flexible conlleva grandes deducciones fiscales para los empleados, pero también para las empresas. No obstante, hay ciertas limitaciones a este tipo de retribución.
- Únicamente se puede recibir un 30% del salario bruto como retribución flexible.
- Se tendrá en cuenta el salario en especie a la hora de recibir cualquier tipo de prestación de la Seguridad Social, tal es el caso de las prestaciones por desempleo o la indemnización por despido.
- Se ha de tener el beneplácito del trabajador para poder pagarle parte de su salario mediante retribución flexible.
Beneficios de la retribución flexible
La retribución flexible cuenta con muchos beneficios, tanto para la empresa como para el trabajador.
Deducciones fiscales
Cuando una empresa ofrece, por ejemplo, un seguro de salud para toda la familia del trabajador, este tipo de retribución no ha de tributarse por IRPF en el caso del trabajador. Así, si un trabajador cobrara un salario bruto de 25 000 euros anuales sin ningún tipo de retribución flexible, percibiría, una vez descontado lo que se ingresa a la Seguridad Social y lo que se tributa por IRPF, 18 532,50 euros. Sin embargo, supongamos que el trabajador percibe 1500 euros anuales en concepto de seguro de salud para toda la familia. Al no tener que tributar por IRPF, el trabajador percibiría al año un salario de 18.975 euros, lo que supone un ahorro anual de 442,50 euros.
Mayor productividad
Está demostrado que las empresas que ofrecen este tipo de retribución a los trabajadores, obtienen un mejor rendimiento de estos. Además, tienen un ambiente laboral mucho más sano, ya que los trabajadores se sienten estimados por la entidad.
Menor coste para la empresa
Cuando la empresa suscribe un seguro de salud para un trabajador en concepto de retribución flexible, no sólo consigue deducirse este gasto en el Impuesto de Sociedades, sino que, además, pagará menos de lo que cuesta el seguro, teniéndose en cuenta que no tiene que cotizar por este concepto. Por su parte, al trabajador le cuesta menos este tipo de servicios o productos de lo que le costaría si lo contratara por sí mismo.
La retribución flexible es cada vez más habitual en grandes y medianas empresas que apuestan por subir el salario de sus trabajadores sin aumentar significativamente sus gastos. Las ventajas tanto para los empleados como para la compañía son tan notables, que el clima laboral se hace más agradable y aumenta la productividad, por lo que es una de las mejores opciones a la hora de ofrecer alicientes al talento de la plantilla.
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